Hoy en día, en la mayoría de los hogares, nos encontramos como mínimo una consola de última generación como la Play Station 3, la Xbox 360 o la Wii entre otras. Estos aparatos, no son utilizados únicamente por los niños y/o adolescentes del hogar, sino que cada vez son más los adultos que dedican varias horas diarias a los videojuegos.
Si nos fijamos en los juegos más vendidos en la actualidad, observamos que destacan principalmente aquellos que fomentan la violencia y que sin darnos cuenta en muchas ocasiones los hombres destacan por su fortaleza y las mujeres por su atractivo físico, sin olvidar el uso del lenguaje soez en su mayoría, y su clara dirección hacia un público principalmente masculino.
Algunos de los videojuegos más actuales que he analizado son Gears of war 3, el Assasins creed 2 y el
Mortal Kombat
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El primero de ellos, tiene la cooperación como uno de los principales valores, ya que para poder pasarse el juego es necesario que todos los miembros del grupo jueguen de forma cooperativa y trabajen siempre en equipo. En él, se encuentran principalmente varones, de los cuales uno es de raza negra; aunque existe también la posibilidad de escoger personajes femeninos. Ambos vestidos de forma similar en la que no se refleja en ningún momento la diferenciación de roles entre ambos sexos. De hecho, considero que esto supone un punto a favor de la mujer, ya que se la representa como una figura más en la que tiene la misma función y la misma finalidad que los hombres, teniendo todos la misma importancia en el equipo.
Con respecto al aprendizaje, es importante destacar que el juego no tiene ningún aprendizaje en sí, ya que se trata únicamente de matar a los enemigos y salvar a la raza humana sin ninguna otra finalidad ni cometido. Teniendo en cuenta el código PEGI, considero que tiene una valoración adecuada, ya que el juego refleja un alto nivel de violencia y brutalidad, sin necesidad de añadir que no refleja ningún tipo de aprendizaje positivo ni representa ningún valor positivo más que el de el trabajo en equipo y la cooperación, aunque añadiríamos a esto que también representa de alguna manera la igualdad de roles entre ambos sexos. Por ello, creo que no es un juego apto para menores de edad y que no se debería permitir jugar a este juego a los que no cumplan con los requisitos necesarios especificados por el código PEGI.
Con respecto al Assasins Creed 2, se coopera con otros miembros de la hermandad de asesinos sin ningún tipo de distinción de raza o sexo. La diversidad cultural se manifiesta en toda la saga, ya que se juega en diferentes momentos de la Historia y diferentes lugares del mundo (concretamente el segundo está ambientado en la Italia del siglo XV) , sin discriminar a ninguna etnia o raza. Cabe resaltar, que antes de que aparezca al título del juego en pantalla, aparece una frase que reza " Inspirado en sucesos y personajes históricos. Esta obra de ficción ha sido diseñada, desarrollada y producida por un equipo mutlicultural de diferentes creencias religiosas" y durante el juego no se aprecia ningún acto de discriminación por raza.
En el juego en cuestión hay diferentes tipos de personajes con los que interactuar para conseguir algo: mercenarios, ladrones, cortesanas, etc. Cada clase social es representada de la forma en la que se vestía en la época. Por ello puede pensarse que hay matices machistas, ya que las cortesanas visten y actúan como tal, pero la forma de interactuar con ellas no es "comprar sus servicios sexuales", si no pagarlas para que distraigan a guardias (con bailes o frases ligeramente sugerentes) mientras el jugador se adentra en la zona sin ser visto.
No se trata de un juego educativo, ya que, en numerosas ocasiones debemos asesinar y/o luchar contra enemigos para conseguir nuestro objetivo. Por otra parte, no estoy de acuerdo con la valoración del código PEGI, debido precisamente a esos actos de violencia para conseguir un fin y a que, en dichas escenas se muestran detalles como sangre, gritos de dolor o provocaciones por parte del personaje- jugador hacia los personajes- no jugadores.
El último juego que he analizado, es el Mortal Kombat, un videojuego en el que es necesario ir ganando combates para ir ascendiendo en un ranking e ir avanzando a lo largo de la historia. A lo largo de toda la experiencia de juego, hay actos de violencia explícita llegando a extremos como que el juego muestre formas sádicas y desagradables de terminar con tu adversario o que se observen hemorragias y lesiones de forma muy explícita (muestra hasta cómo se rompen los huesos al realizar ciertos golpes y en ocasiones lo hace a cámara lenta). Existe la posibilidad de jugar en modo cooperativo pero no es necesario para jugar ni para terminarlo, simplemente es un aliciente para los jugadores. En cuanto a los roles que desempeñan los personajes, todos realizan artes marciales y ataques mágicos. Cabe resaltar el vestuario y la actitud de todos los personajes femeninos, ya que visten de forma provocativa (tangas, ligueros, prendas con mucho escote, o que insinúan muchas zonas del cuerpo de la mujer) y realizan movimientos sensuales antes y después de los combates, para presentarse ante sus adversarios o para mostrar alegría o deseos de venganza en función de los resultados de los combates. Con respecto a temas etnográficos, no cabe destacar ninguno en particular, ya que nos encontramos personajes de diversas razas y en los que no se realiza ningún comentario racista ni machista.
Este juego no es educativo desde ningún punto de vista, ya que, directa o indirectamente muestra que la violencia o la muerte del adversario es el único camino hacia la victoria y da una imagen de la mujer que no es para nada educativa dada la forma que tienen de vestir o la actitud de los personajes femeninos. Por ello, estamos de acuerdo con el código PEGI debido al lenguaje soez y al gran fomento de la violencia que suponen este tipo de juegos.
Como podemos observar, todos ellos son sumamente violentos y la gran mayoría utilizan un lenguaje soez en el que utilizan palabras malsonantes y ofensivas hacia el oponente. Es importante destacar que todos y cada uno de los juegos anteriores están al acceso de cualquiera. Además, ninguno de ellos refleja ningún valor positivo más allá de la cooperación y todos son sumamente violentos y en su mayoría explícitos, además, cabe destacar que aquellos que fomentan la cooperación lo hacen con el fin de matar a los enemigos, por lo que a pesar de el trabajo en equipo y la cooperación, el fin de la misma es siempre un valor negativo que implica la violencia. Además, ninguno de ellos tiene prácticamente nada en cuenta los sentimientos de los demás; es más, es al contrario, el personaje goza más de acabar con el enemigo cuanto más agresivo y más daño le hace.
Creo que el código PEGI tiene en cuenta el valor educativo de los juegos así como el fomento de los diversos valores además de otras cosas, y por ello estoy conforme en su totalidad con las edades estipuladas en ellos para poder jugar, a pesar de que no se cumplan estas advertencias. Por otra parte, me veo obligada a resaltar que los valores que transmiten no son para nada positivos, y que de ningún modo resultan educativos; sino que reflejan la violencia y el daño hacia los demás obteniendo como resultado únicamente la satisfacción del jugador por haber conseguido alcanzar el final del juego.
Creo que la sociedad debería tener en cuenta la evolución que han sufrido los videojuegos a lo largo de los últimos 10 años, ya que mientras que antes predominaban mucho los juegos de plataformas y juego en cooperativo, ahora son los juegos violentos los que están de moda y los que más benefician a las empresas de videojuegos. Por ello considero que las familias deberían hacer caso de las advertencias que aparecen en las portadas de los juegos al igual que prohiben ver a sus hijos películas no recomendadas para menores de una cierta edad, ya que en muchas ocasiones los videojuegos transmiten unos valores peores que las películas. Además, actualmente los adolescentes pasan la mayor parte de los días jugando a los videojuegos, lo que ya ha supuesto en más de una ocasión el delirio debido a la obsesión y la adicción fomentada por el juego; adicción que debemos comenzar a difundir al resto de la sociedad para que tengan presente todas estas advertencias y el verdadero peligro de los videojuegos actuales, puesto que lo que está en juego no es otra cosa que la educación de nuestros hijos, de la futura sociedad.